Un reciente estudio ha puesto de manifiesto que el sobretratamiento en hombres con cáncer de próstata y una esperanza de vida limitada sigue siendo un problema persistente, incluso en la era de la vigilancia activa. En algunos casos, esta situación ha empeorado, especialmente en tumores de riesgo intermedio y alto.
El Dr. Timothy Daskivich, del Cedars-Sinai Medical Center en Los Ángeles, explicó que, aunque la vigilancia activa ha reducido el tratamiento excesivo en pacientes con tumores de bajo riesgo, no ha logrado mejorar el panorama en aquellos con menor probabilidad de beneficiarse del tratamiento debido a su longevidad limitada. Este hallazgo subraya un desafío continuo en la atención oncológica, especialmente en hombres cuya esperanza de vida es menor a 10 años.
El estudio, publicado el 11 de noviembre en JAMA Internal Medicine, analizó datos de más de 243,000 hombres diagnosticados con cáncer de próstata localizado entre 2000 y 2019, utilizando el sistema de salud de Asuntos de Veteranos (VA) en Estados Unidos. Según los resultados, el 21% de los pacientes tenía una expectativa de vida menor a 10 años y el 4% menor a 5 años. El sobretratamiento fue definido como la administración de tratamientos agresivos, como cirugía o radioterapia, en pacientes con esperanza de vida limitada y enfermedad de bajo a intermedio riesgo.
Entre los hallazgos clave destaca que, si bien el tratamiento excesivo en tumores de bajo riesgo disminuyó un 22% en pacientes con menor longevidad, el sobretratamiento de tumores de riesgo intermedio y alto aumentó un 22% y 29%, respectivamente, durante el periodo de estudio. Esto refleja una tendencia preocupante: los avances en la vigilancia activa no han tenido un impacto proporcional en la población más vulnerable.
Impacto del sobretratamiento
El sobretratamiento, particularmente en casos en los que el cáncer no representa una amenaza inmediata, puede causar daños significativos. Según el Dr. Christopher Anderson, urólogo del Centro Médico de la Universidad de Columbia Irving, los efectos secundarios incluyen complicaciones urinarias, intestinales y sexuales, además de estrés psicológico y costos financieros innecesarios.
Una de las causas principales de este problema es el exceso de cribado inicial, que puede desencadenar una cascada de intervenciones médicas innecesarias. Los expertos, como las Dras. Nancy Li Schoenborn y Louise Walter, sugieren en un editorial asociado que integrar el análisis de la esperanza de vida en la toma de decisiones clínicas es crucial para reducir estos daños.
Retos en la práctica médica
A pesar de los avances, muchos médicos enfrentan dificultades para discutir la esperanza de vida con sus pacientes. El Dr. Daskivich señaló que algunos profesionales evitan estas conversaciones, aunque los pacientes manifiestan querer información clara para tomar decisiones informadas. Resolver este problema requiere no solo mejorar las herramientas de predicción de longevidad, sino también educar a los médicos sobre cómo abordar estos temas sensibles de manera efectiva.
En última instancia, aunque algunos pacientes podrían optar por tratamientos agresivos a pesar de su esperanza de vida limitada, es esencial que estas decisiones se basen en datos sólidos y en una comprensión clara de los riesgos y beneficios.
Conclusión
El estudio resalta la necesidad de un enfoque multifacético para abordar el sobretratamiento en el cáncer de próstata. Esto incluye optimizar las herramientas de predicción de longevidad, educar a los profesionales de la salud y fomentar una toma de decisiones compartida entre médicos y pacientes. Aunque la vigilancia activa ha sido un paso en la dirección correcta, queda trabajo por hacer para garantizar que los tratamientos sean verdaderamente personalizados y adecuados a las circunstancias de cada paciente.
Fuente: https://www.medscape.com/viewarticle/prostate-cancer-has-active-surveillance-solved-problem-2024a1000ky9?form=fpf