A las 12:29 del 8 de abril, la sombra de la luna se cernió sobre la Tierra, marcando el momento en que miles de personas dirigieron sus miradas al sol. En el tranquilo poblado de Nazas, Durango, la llegada masiva de visitantes convirtió la calma en una vibrante expectativa por presenciar el raro fenómeno del eclipse solar total, que también se apreciaría en otros estados de México, así como en Estados Unidos y Canadá. Este evento astronómico, único en su tipo, no se repetirá en México hasta el año 2044.
La anticipación había agotado las reservas de hoteles y plataformas de alojamiento en las ciudades del norte de México, donde el eclipse oscurecería el día por poco más de cuatro minutos. Incluso, los habitantes locales prepararon alojamientos adicionales para recibir a familiares, amigos y visitantes extranjeros ansiosos por presenciar cómo la luna bloquearía el sol, revelando la esquiva corona solar, visible solo durante los eclipses totales.
La demanda de lentes especiales para la observación segura del sol, recomendados por la NASA y certificados con la norma ISO 12312-2, había alcanzado niveles extraordinarios semanas antes del evento, con algunas tiendas prometiendo entregas posteriores al 12 de abril. Sin embargo, en la región de Nazas, este espectáculo celeste se repetirá dentro de 400 años, haciendo que la adquisición de estos lentes se convirtiera en una inversión a largo plazo.
Los expertos de la NASA confirmaron a Nazas como el lugar ideal para observar el eclipse, gracias a su cielo claro y libre de nubes, además de ser el sitio con la duración más larga del eclipse total en todo el mundo, alcanzando los 4 minutos y 28 segundos (algunos incluso sugirieron 4 minutos y 29 segundos). Campamentos a orillas del río Nazas y espacios públicos se habilitaron para los visitantes, mientras que el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) colocó una placa que certifica a Nazas como el epicentro del Eclipse Solar Total del 8 de abril de 2024.
Equipados con lentes especiales o vidrios para soldador sombra 14, recomendados por expertos, los visitantes y lugareños observaron con asombro cómo la luna comenzaba a ocultar el sol, desencadenando una serie de emociones cuando, finalmente, a las 12:29, la sombra de la luna envolvió por completo la Tierra. Parvadas de pájaros regresaron a sus nidos y animales domésticos buscaron refugio, mientras la temperatura descendía durante los 4 minutos y 28 segundos de duración del eclipse.
A medida que la sombra lunar se desvanecía, los rayos del sol gradualmente iluminaron nuevamente la Tierra, marcando el final del eclipse a las 13:39, dejando en su estela recuerdos imborrables y la certeza de haber sido testigos de un evento celestial excepcional.
Fuente: https://www.milenio.com/content/eclipse-solar-mexico-vivio-nazas-durango